La nueva víctima de feminicidio fue maniatada en su cama y brutalmente torturada por más de 15 horas presuntamente por su expareja en complicidad de otros hombres. Las pocas palabras que dijo la mujer a su hermana antes de desmayar fueron: “Ramón me jugó todito mal” sindicando a su agresor.
Lidia Mercedes Añazco Ovelar de 41 años es la víctima que lamentablemente pasa a formar parte de las estadísticas de feminicidio. La misma fue encontrada por su hijo menor de 11 años atada a su cama y con rastros de haber sido torturada de la manera más cruel.
Estaba tapada con una sábana, tenía golpes en todo el cuerpo y sus agresores intentaron matarla dándole un fuerte golpe en la cabeza, lo que la dejó agonizando. Aparentemente habrían utilizado un palo con el que Lidia tranca la puerta, para golpearla.
El ataque ocurrió en la noche del pasado viernes 13 de agosto, en la vivienda ubicada en la Compañía Teniente González de Caraguatay, Dpto. de Cordillera. La víctima fue auxiliada hasta el Hospital Nacional de Itauguá donde finalmente falleció.
El feminicidio se consumaba cinco días después
La muerte de Lidia Mercedes Añazco se produjo el miércoles 18 pasado en el Hospital Nacional de Itauguá y por el caso ya se encuentra detenido la ex pareja de la víctima a quien ella misma había acusado de torturarla.
Se trata de Ramón Aquino Giménez de 37 años de edad, quien ya fue imputado por feminicidio, al igual que su vecino Simón Pérez de 43 años. Los investigadores presumen que tres personas más participaron de la mortal agresión.
La agente fiscal Lucía González descartó que la victima haya sido abusada sexualmente y desconocen el motivo del crimen con tanto ensañamiento, pero familiares de la fallecida contradicen a la representante del Ministerio Público, debido a que la víctima fue encontrada semi desnuda en su cama, cubierta solo con una sábana.