Una comitiva fiscal-policial allanó el jueves una vivienda ubicada en el barrio Espíritu Santo de la ciudad de Caapucú donde detuvieron a Juan Daniel Álvarez de 26 años, el principal sospechoso del asesinato de su expareja, Manuela Barboza(44).
Cabe recordar que el homicidio de la mujer ocurrió entre el 27 de diciembre y enero y el cuerpo en avanzado estado de descomposición fue encontrado el 1 de febrero pasado en una antigua vivienda abandonada, ubicada en el barrio Central de dicho municipio.
Por disposición de la Jueza de Garantías de Quiindy, Ramona Melgarejo, la agente fiscal Teresita Paredes acompañada de agentes de la Dirección General de Investigación Criminal, y de Investigaciones allanaron ayer la casa de la expareja de la fallecida quien contaba con orden de captura por feminicidio.
Las pesquisas iniciaron tras el hallazgo del cadáver, debido a que había una denuncia de desaparición de Barboza por parte de sus familiares. En principio la carpeta fiscal estaba caratulada como suicidio por ahorcamiento, pero los investigadores no estaban convencidos de que se haya tratado de un suicidio por lo que siguieron con las pesquisas que ahora apuntan a un feminicidio según la Policía. El trasfondo habría sido los celos desmedidos de Álvarez, debido a que su expareja tenía intenciones de ir a trabajar al Chaco, según el relato de sus familiares ante la fiscala Paredes.
La mujer deja huérfanos a a mellizos: La fallecida tenía hijos mellizos que dejó al cuidado de la señora en cuya casa vivía desde que abandonó al padre de sus hijos. Ella salió de la vivienda con destino a la parada de ómnibus por que iba viajar al Chaco para trabajar, sin embargo desde ese día 27 de diciembre nada más se supo de ella hasta que el 1 de febrero la encontraron muerta en la casa abandonada con una soga al cuello.