Explosivistas de las Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), procedieron a desactivar el artefacto explosivo hallado incrustado en un muro de la Penitenciaría Regional de Pedro Juan Caballero. Se trata de una bomba Power Gel con estopín y mecha de quema lenta de aproximadamente 20 centímetros. Los especialistas concluyeron que el explosivo tiene capacidad destructiva para abrir un boquete de alrededor de dos metros de diámetro.
Este tipo de material bélico puede adquirirse en tiendas especializadas comúnmente en las canteras, dijo el suboficial mayor de Infantería Catalino Gómez, uno de los explosivistas de la FTC.
Luego de ser analizado, el artefacto será remitido a la base del Comando de Operaciones de Defensa Interina para su posterior destrucción. El explosivo fue detectado luego de que se lograra advertir la presencia de un recluso que salió de su celda y estaba cerca del muro, intentando prender fuego a la mecha. Se trata de Jorge Ramírez, quien se encuentra se encuentra recluido por homicidio y robo agravado.
Dos barrotes donde se su celda, donde también se encontraban otros reclusos, fueron cortados. Al parecer, los internos quisieron aprovechar la intensa lluvia que caía en horas de la madrugada para concretar la fuga. Irónicamente, la lluvia mojó la mecha y evitó la detonación del explosivo.