Un cadáver en avanzado estado de descomposición y con dos impactos de bala en la cabeza, fue hallado en el predio de un establecimiento ganadero en Nueva Durango, zona límite entre los departamentos de Canindeyú y San Pedro.
Agentes de la Subcomisaria 26 de Nueva Durango acudieron hasta el lugar del hallazgo tras la llamada que recibieron por parte del administrador de la estancia Itá Kysé, Milcíades Lezcano, quien manifestó que el cuerpo había sido encontrado en una zona descampada y por el estado avanzado de descomposición habría estado en ese sitio desde hacía varios días.
La agente fiscal Inés Estigarribia fue designada a para dirigir la investigación y como primera diligencia dispuso el traslado del cadáver hasta la morgue del Hospital de Curuguaty para la inspección por parte del médico forense y tratar de identificar a la victima.
Tras la inspección, el forense doctor Virgilio González, confirmó que halló dos heridas de bala en el cráneo, y que la victima tenía entre 48 o 72 horas de muerte.