La Policía Nacional informó del hallazgo de un cadáver, que sería de una de las personas involucradas en el asalto a una estación de servicios del emblema Petrobras en la ciudad de Tobatí, Departamento de Cordillera. Se presume al resultar mal herido tras el enfrentamiento a tiros con la Policía, fue abandonado por sus cómplices, quien lograron huir pero después fueron detenidos.
Los dos primeros en caer fueron Silvio Jara Villalba de 58 años alias “Rengo”, y Miguel Ángel Marín Britos de 63 años, ambos con varios antecedentes penales, y sospechosos de estar conectados con el asalto. Los investigadores hallaron el vehículo en la casa quinta “ Rancho El Gordito” en dicho lugar encontraron el auto móvil Toyota Runx, rojo, con chapa BOK 554, que habría sido utilizado durante el asalto.
La Dirección de Policía de Cordillera informó que siendo las 15:15 del miércoles se encontró el cadáver de un hombre en la ciudad de Tobatí, camino a la ciudad de Arroyos Esteros. El procedimiento estuvo a cargo del personal del Departamento de Inteligencia de la División Regional Cordillera que tras la aprehensión de los dos sospechosos el martes pasado en la compañía Yacarey de la ciudad de Piribebuy, recibieron la información de que uno de los supuestos autores del asalto estaba gravemente herido, por lo que sus cómplices lo habría abandonado en una zona boscosa para seguir con la huida.
Los investigadores se constituyeron al lugar indicado y realizaron un rastrillaje por la zona boscosa hasta que finalmente hallaron el cuerpo en total estado de putrefacción.
El comisario Jorge Vidallet, jefe del Dpto. de Investigaciones, dijo que llegaron tres personas al lugar abordo de un vehículo de la marca Toyota, modelo Runx, color rojo, del cual descendieron dos de ellos y uno quedó en el volante estacionado. Los dos delincuentes ingresaron hasta la ofician administrativa, en donde los propietarios estaban realizando el arqueo correspondiente de la caja e intimaron a las víctimas para que entreguen el dinero en efectivo y los cheques que totalizaban la suma de entre 25 a 30 millones de guaraníes. Una vez que las víctimas fueron despojadas del dinero, se produjo un forcejeo entre una de ellas y uno de los delincuentes, se resbaló y se golpeó contra un vidrio que se rompió por completo.
Tras lo sucedido, los dos hombres salieron corriendo y uno de ellos realizó un disparo de arma de fuego para amedrentar a las víctimas, momento en que el cómplice que estaba al volante esperándolos para el escape, dio a la fuga, dejándolos abandonados.
Como no tenían forma de escapar, salieron a la calle y encontraron una motocicleta que no pudieron arrancar, luego corrieron y robaron a una mujer su camioneta de la marca Nissan, modelo Mistral de color negro, para poder darse a la fuga, tomando el camino a Arroyos Esteros, donde abandonaron dicho vehículo al igual que una mochilas. Los desconocidos ingresaron en una zona boscosa, donde hallaron el cadáver de uno de los presuntos asaltantes.