Un trabajo conjunto entre la Policía Nacional, la Patrulla Caminera y la Municipalidad de Ñemby se llevó adelante en la noche de este sábado y madrugada del domingo sobre la avenida Acceso Sur a raíz de la queja generalizada de los pobladores que desde hace dos años vienen denunciando ante las autoridades que los fines de semana no pueden dormir a causa de la polución sonora que generan los vehículos equipados con potentes bafles que se instalan en la zona y juntan a numerosos personas para ingerir bebidas alcohólicas, y escuchar música a todo volumen, mientras otros protagonizan alocadas carreras en motos.
Debido a la insostenible situación por los ruidos molestos que no permiten a los vecinos descansar, muchos dijeron que incluso están usando medicamentos controlados para poder dormir y exigen al Ministerio Público y la Municipalidad que hagan su trabajo, por que la Policía sola no puede actuar contra los inadaptados, necesitan el apoyo de la fiscalía puntualizaron.
