Un desafortunado motochorro recibió una tremenda paliza y además fue atado de pies y manos tras intentar asaltar a un grupo familiar que estaba compartiendo frente a una vivienda. Durante el atraco el delincuente apuntó a la cabeza de un niño con su arma de fuego y gatilló más de una vez, pero al fallar el arma las víctimas reaccionaron y lo molieron golpes.
Luego de ser entregado a los policías, el malviviente tuvo que ser llevado a un hospital por causa de las lesiones. El frustrado asalto que terminó mal para el delincuente se registró el domingo a las 16:20 horas en el barrio María Auxiliadora del Km. 7,5 Acaray, en inmediaciones de la plaza del mismo nombre.
El que recibió un poco de su medicina es el motochorro Cristian Ariel Benítez Vergara (25), vecino del barrio Fátima-Zona Sur, que quedó privado de su libertad tras ser entregado a personal de la subcomisaría 46. De su poder los policías requisaron un revólver calibre 32mm. sin balas, y una motocicleta Kenton GTS 150cc negra, sin chapa y sin documentos. Resultaron víctimas de intento de asalto Juan Bautista Quintana Reyes (47), sus hijos Jonathan David Quintana Espínola (18), Shirley Marlene Espínola (26), y su nieto de 2 años.
De acuerdo a los datos, las víctimas se encontraban compartiendo en la vereda de su vivienda cuando el motochorro llegó en su motocicleta y les saludó. Segundos después extrajo el revólver que tenía en la cintura y anunció el asalto, pidiendo a todos que entreguen sus teléfonos celulares. Nervioso, el delincuente primero apuntó con su arma a la mujer y luego a la cabeza de su sobrino pequeño.
Al no tener los celulares, el bandido gatilló varias veces su revólver mientras apuntaba al niño, pero por fortuna el arma no disparó. Ante tal situación, las víctimas reaccionaron y se abalanzaron sobre el mismo. Luego de desarmarlo lo molieron a golpes y pidieron ayuda de vecinos para sujetarlo y atarlo de pies y manos. El delincuente motorizado quedó recluido a disposición de la fiscal de turno Hermenegilda Cubilla.